La regeneración urbana es un proceso que no solo transforma el entorno físico, sino que representa un enfoque de intervención en el que los principios de inclusión social, resiliencia, compacidad, participación comunitaria y prosperidad socioeconómica son el punto de partida para el desarrollo sostenible en nuestras ciudades.
Los días 1 y 2 de diciembre tuvo lugar en Bilbao la Reunión Global de Expertos Regeneración Urbana como herramienta para una recuperación inclusiva y sostenible en la que participó URBACT.
La reunión fue organizada conjuntamente por la oficina de ONU-Habitat en España y el Gobierno Vasco, y contó con la participación tanto de expertos de ONU-Habitat como de otros expertos internacionales, nacionales y representantes gubernamentales.
En ese diálogo, se intercambiaron y compararon experiencias internacionales y buenas prácticas, identificando las condiciones previas necesarias para los gobiernos que buscan desarrollar políticas e intervenciones de regeneración urbana, considerando nuevas vulnerabilidades y tendencias surgidas en las ciudades durante la COVID-19.
Carmen Sánchez-Miranda, jefa de la oficina de ONUHabitat en España, e Ignacio de la Puerta, director de Planificación Territorial y Agenda Urbana del Gobierno Vasco, dieron la bienvenida a unas jornadas en las que expertos y representantes de instituciones como ONU-Habitat, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, el Gobierno Vasco, la Universidad de Deusto, CGLU, INCASOL, World Resources Institute, los Ayuntamientos de Rotterdam, Copenhague y Teherán, URBACT, ISGlobal, la Agenzia per la Cohesione Territoriale de Italia, Agence Nationale pour la Rénovation Urbaine de Francia o el Joint Research Center y DG REGIO de la Comisión Europea, entre otros, reconocieron que la regeneración urbana se ha transformado en una de las herramientas fundamentales que se deberían aplicar para promover una recuperación inclusiva, justa y sostenible.
La necesidad de procesos de regeneración urbana para revertir las dinámicas urbanas negativas se ha vuelto a enfatizar como resultado del COVID-19 y la crisis climática, que derivan en un aumento de la desigualdad espacial. Por estas razones, los procesos de regeneración urbana son más necesarios que nunca y deben promover una recuperación inclusiva y sostenible que impacte de forma positiva en los ámbitos urbano, social, económico, físico y ambiental.
Con este diálogo se quieren establecer unas “Directrices para la Regeneración Urbana Inclusiva y Sostenible”, que apoyen metodologías para monitorear la desigualdad espacial y, con ellas, generar beneficios directos para los residentes urbanos.